El Gitanillo de Vélez, durante una actuación con motivo de la Navidad.

Gitanillo de Vélez es uno de los muy escasos cantaores que se han acompañado a sí mismos, pero en su caso cuenta con el reconocimiento de hacerlo más que bien, llegando a grabar como acompañante de varios artistas de gran valía.

Luis, vecino de la Villa durante años, es un cantaor valiente y de gran pureza. Conoce prácticamente todos los estilos y su cante, impregnado de "sonios negros", nos recuerda a la figura de Terremoto de Jerez, con quien compartió escenario, además de con Antonio Mairena, Camarón de la Isla y Antonio el Chaqueta, entre otros.

En una tierra de gloriosas voces blancas como las de Juan Breva y Niño de Vélez, el patrimonio flamenco no estaría completo sin la voz bronca, jonda y "afilá" de Gitanillo.

Tal vez influenciado por la escuela de Juan Breva y seguro de aquel gitano tan querido y entrañable como fue Constantino, acostumbra a acompañarse con la guitarra, para la que tempranamente demostró aptitudes especiales. Como integrante de compañías, llevó su arte a todas partes del planeta (de Hispanoamérica a Japón).